Pero dejando de lado el impulso a la inclusión, la industria de la moda casi ha excluido a los modelos con discapacidad, ya que aún quedan fuera de la mayoría de los anuncios de campaña y espectáculos de pasarela a pesar de la demanda hacia la inclusión, campañas y uno que otro director creativo que si los ha aprovechado como es el caso de Nicola Formichetti. Esta falta de representación tiene implicaciones: como cuando pasas largo tiempo sin ver a gente igual a ti, es fácil interpretar que la falta de representación significa que eres feo e indigno, que mereces ser invisible o incluso peor, es grotesco.
A pesar de todo esto, la revista Teen Vogue lanza una nueva edición con hermosos representantes de los antes ignorados modelos con discapacidad. Si bien ya la moda hace desfiles unisex, ropa unisex, y ha abierto el campo para todas las razas, ahora les toca el turno a ellos de reclamar su espacio.
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