En una pequeña y torcida calle de Seúl, justo al lado de la calle principal de Cheongdam, hay una elegante caja de joyas negras de un salón, donde el trabajo de la inconformista Eun Kyung Park, es la base de la casa para las manicuras que están rompiendo fronteras y ha tomado Instagram como rehén.
Pedazos de vidrio rotos se volvieron virales la semana pasada, y eso fue culpa de Park, aunque a decir verdad, estos diseños experimentales eran sólo el comienzo. "Las uñas que hago están diseñadas de forma única, pero sencillas y minimalistas", dice Park acerca su enfoque impactante pero fácil de usar. Pero a pesar de que sus diseños enloquecidos (como el de un pedazo de color vino con un borde de cadena de oro, o el de mármol blanco y negro retorcido) revelan la precisión y el control de una mano experta, Park insiste en que trabaja sólo experimentando libremente; por ejemplo, esos pedazos de cristal rotos los soñó hace cinco meses, primero trató de replicar su brillo espejado con envolturas de caramelo de celofán, que cortó y aplicó a las uñas pero según ella eran "demasiado tiesos" hasta que dio con un rollo fino de película holográfica de Japón el cual produjo un mejor Resultado para sus primeras versiones. "Al principio, tomé ese papel y pasé mucho tiempo cortándolo con tijeras, arreglándolo individualmente en cada uña, y pinté un abrigo de gel en la parte superior", nos explica "Ahora los hemos convertido en pegatinas, así que es un poco más fácil de hacer".
En conclusión: las uñas de vidrio roto son un efecto especial hecho con pegatinas, ahora se venden en capas una sobre la otra para crear este efecto de vidrio con textura tan hiperrealista que los rumores de Internet han girado sobre los peligros potenciales de romperlos y etc. Y cabe resaltar también que dos veces al año, su trabajo más inventivo brilla en la Semana de la Moda de Seúl.
Así pues, di hola Internet, y preparense para la tendencia del roto.
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