"La androginia es la perfección, pero yo también estaba pensando en la biodiversidad, lo multicultural y lo multiétnico", dijo Kean Etro, que quiere casarse con las telas femeninas, pero teniendo claras las siluetas con cortes y formas masculinas.
En su propuesta había pantalones estrechos y chaquetas que llegaban hasta la rodilla, la mayoría pintadas de un rosa polvoriento y ocre. Otros trajes vinieron estampados de Paisleys entrelazados con pequeños puntos o patrones en tribales, mientras que las formas abstractas como plumas o diamantes danzaron a través de las prendas con un brillo superficial pero a su vez sutil. Las camisas por su lado, fueron algunos de los aspectos más destacados, ya que brillaban como las escamas de peces exóticos, con hilos tornasol y toques de metálicos, pavoneándose por la pasarela, con todo ese glamour, como un orgulloso pavo real macho.
Y es que también la temporada hasta ahora ha hablado solo de telas y mucho volumen de fluidos aireados, pero a diferencia de esto, Etro ha contado con patrones elaborados, jacquard, tornasolado, y las siluetas delgadas envueltas en un arco iris de colores vintage.
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