Domenico Dolce y Stefano Gabbana acababan de mostrar lo que debía clasificarse como el mayor golpe de participación por parte de la audiencia en el mundo de la moda, ya que en su ultimo desfile participaron más de 140 personas de muchas formas, etnias y edades, cada uno de ellos vestidos con ropa que propiamente habían elegido, acompañándolos con accesorios respectivamente también de su elección.
Había desde madres, hijas, hermanas, hermanos, novios, novias, niños pequeños y bebés; Una tribu de milenarias internacionales, hasta miembros de familias reales europeas, y tantas generaciones de dinastías de música, y actuación. Hubo tanta gente que participo en esto, que un documento de identificación de diecisiete páginas fue distribuido a la prensa antes del espectáculo en el que el carácter de la gente fue el protagonista, y según los socios Dolce & Gabbana ya habían tenido una atracción a este tema desde el principio; Cabe decir que si nos remontamos a su primer desfile que fue a mediados de los 80´s, este fue hecho con personas reales.
Domenico Dolce y Stefano Gabbana son realmente inteligentes hombres de negocios, pero hay una sensación de que este espectáculo sólo fue posible porque nació a partir de las relaciones humanas, y del deleite de Domenico en cortar y alterar la ropa para que cada persona se sienta fantástica y única. En esta colección las relaciones y los recuerdos conspiraron para hacer que los clientes se relajen fantásticamente al comprar los diseños de Dolce & Gabbana, donde el mensaje claramente es: Tienes que aceptarte como eres.
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